Averías más frecuentes de los coches eléctricos

Los coches eléctricos tienen hasta un 60% menos de componentes que hay que mantener si se comparan con los coches de combustión. No tienen un motor de gasolina o diésel y, por tanto, no necesitan cambiar el aceite o el filtro del aire. Sin embargo, sí tienen otras piezas comunes que hay que revisar cada cierto tiempo como los neumáticos, los frenos o el sistema de refrigeración que, en lugar de estar destinado al motor, está pensado para mantener frías las baterías.

Los Socios del RACE disfrutan de una garantía mecánica que incluye
la reparación y sustitución de la batería del coche eléctrico.

¡Quiero saber más!

Además, los coches eléctricos también tienen componentes propios que pueden fallar. Antonio Ariza, asesor técnico del RACE, explica las averías más frecuentes que pueden aparecer en los coches eléctricos.

La avería más frecuente de los coches eléctricos: los fallos de la carga

Los coches EV, los 100% eléctricos, funcionan gracias a un motor eléctrico que es alimentado a través de una batería. Cuando esa batería se descarga, el usuario conecta el coche a una toma de pared para volver a cargarla. Sin embargo, es relativamente común que haya fallos en la carga por diferentes motivos:

  • El usuario no manipula bien el conector, le da golpes o incluso tira del cable cuando el coche está cargando. Cuando esto sucede, el propio vehículo bloquea el conector para que la carga se realice bien y, además, para que si a algún indeseado se le ocurre desconectar la manguera de carga no lo pueda hacer. Sin embargo, hay quien no se da cuenta e intenta tirar del cable mientras se produce la recarga. Lo correcto es abrir el coche para poder desbloquear el conector.
  • El pin del conector que está destinado a comunicar la estación de carga con el coche puede estar doblado o tener algún tipo de fallo. Si esto sucede, no hay comunicación entre ambos dispositivos y, por tanto, la carga no se inicia.
  • ¡Que no se te olvide contratar más potencia! Aunque hayas instalado un cargador de pared (wallbox), si no contratas potencia extra para la casa, el coche no se cargará o lo hará muy despacio. Es un error muy común que puede ocurrirles a aquellos que son neófitos del coche eléctrico. Para que te hagas una idea, una carga media ronda entre 10 y 16 amperios (se puede realizar con conectores schuko que utilizas para conectar tu nevera al enchufe de la pared), mientras que una carga rápida puede ascender hasta los 40 A.
  • El punto de carga está en mal estado. Puede ocurrir que vayas a cargar tu coche a un punto de carga público o privado y que la carga se interrumpa y no puedas desconectar el cable. En ese caso, Ariza recomienda buscar el diferencial que debe tener el punto de carga (como el que tienes cuando se produce un cortocircuito en tu casa) y desconectarlo. Ahí ya podrás desconectar el conector y volver a subir el diferencial. No vuelvas a conectar tu cable ahí y llama al técnico del punto de carga para que tenga constancia de que hay una avería.
  • El punto de carga no está activo. También puede suceder que, aunque hayas buscado un punto de carga y te aparezca como activo en la aplicación que utilices para buscar cargadores, no esté en funcionamiento. Ahí te será imposible realizar la recarga.

El sistema de frenada regenerativa puede tener una avería

La frenada regenerativa es un sistema que utilizan los coches eléctricos para recuperar parte de la energía que se produce al frenar el vehículo. Funciona con un convertidor que transforma la energía calorífica de los frenos en energía eléctrica. Puede ocurrir que ese convertidor falle y, por tanto, el coche eléctrico no acumule energía.

Esta avería del coche eléctrico la vas a apreciar cuando en el panel de instrumentos veas que la pila, que te aparece en la pantalla cada vez que actúa la frenada regenerativa, no cambia de color. Además, también se aprecia en que la batería pierde energía más rápido de lo normal, sobre todo cuando circules en ciudad, que es donde más se utiliza la frenada regenerativa.

Gracias a la frenada regenerativa, los discos y las pastillas de freno sufren mucho menos el desgaste que un coche de combustión. Como ejemplo, si las pastillas hay que cambiarlas cada 60.000 km en un coche de combustión, en un coche eléctrico pueden durar hasta el doble o incluso más, dependiendo también del tipo de conducción que hagas.

Las baterías de los coches eléctricos: pueden tener una avería y no va a ser barata

La batería de un coche eléctrico es una de sus piezas más importantes y, con diferencia, la más cara del vehículo. Los fabricantes suelen ofrecer una garantía de 8 años o 160.000 kilómetros. A partir de aquí, sus componentes se van deteriorando y su capacidad de almacenamiento se va a reducir drásticamente. De ahí que, a partir de esos años, se suela cambiar la batería (cambiar sólo una celda supone un desembolso de unos 1.500 euros y la batería completa puede partir de los 6.000 euros) y se reaproveche para otros usos como el almacenamiento de energía en el hogar. Los Socios del RACE están tranquilos ya que disfrutan de una garantía mecánica que incluye la reparación y sustitución de la batería del coche eléctrico.

Que dure más o menos la batería de un coche eléctrico va a depender de muchos factores, entre ellos influye mucho el tipo de recarga: si haces cargas rápidas vas a restar la vida útil de la batería de tu coche eléctrico. Esto es porque cuando la carga se realiza a un alto amperaje, los electrones que están en movimiento generan calor. Ese exceso de calor lo van a sufrir las propias celdas de las baterías, además de los cables que transmiten la electricidad (para combatir esto las baterías tienen un sistema de refrigeración). Por eso, es recomendable hacer el menor número de cargas rápidas y siempre tener una carga de entre el 20% y el 80% de la capacidad de la batería.

El software: otra avería muy común en los coches eléctricos

Los coches eléctricos suelen utilizar un software que se actualiza cada cierto tiempo. Sin embargo, ese proceso hay veces que falla. En ocasiones, es tan grave el problema que el coche ni arranca y no queda otra que, en caso de ser socio, llamar al RACE y llevar el coche al servicio técnico para que lo reseteen.

Durante el proceso de actualización no debes arrancar el coche ya que se puede llegar a bloquear. No obstante, en el RACE también hemos tenido casos en que los Socios respetaban las indicaciones del fabricante y durante tres horas la barra de actualización no pasaba del 1%, algo que no es normal.

Más allá de estas averías comunes, recuerda que los coches eléctricos también necesitan un mantenimiento en las ruedas, la dirección, las suspensiones, luces, etc. Y también tienen que pasar la ITV.

Si por culpa de una avería en tu coche, debes de llevarlo a un taller,
acude a uno de los talleres RACE Eurekar.

¡Encuentra tu taller más cercano!

Compartir:
Compartir:
Más sobre Tecnología y motor