Partes del tubo de escape

Cuando se piensa en un tubo de escape, normalmente vienen a la mente esos cilindros visibles y brillantes en la parte trasera y baja del coche, por donde sale humo. Sin embargo, son muchas más las partes del tubo de escape que recorren todos los bajos del vehículo, que no se aprecian a simple vista, y que conforman el sistema de escape. En este contenido te vamos a explicar todas las piezas que forman el tubo de escape y, en general, todo el sistema de escape.

Los Socios del RACE disfrutan de una garantía mecánica con reparaciones en las que se incluyen muchas partes del escape.
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El sistema de escape es mucho más que un tubo de escape

Rafael Soriano, asesor técnico del RACE, explica que el tubo de escape tiene como misión eliminar en la medida de lo posible los gases generados tras la combustión, tanto en un motor diésel como en uno de gasolina, y así superar la normativa anticontaminación establecida cada cierto tiempo. En la actualidad está vigente la Euro 6 y, a partir de julio de 2025, comenzará la Euro 7.

Tras los cuatro tiempos de trabajo del motor en los que finalmente se quema el combustible en contacto con el oxígeno, salen sustancias como: monóxido de carbono, dióxido de carbono, hidrocarburos no quemados, óxidos de nitrógeno… Algunos de estos elementos son más perjudiciales que otros para el medio ambiente, así que con el tubo de escape se mitigan las emisiones a la atmósfera, además de que se reducen los ruidos generados tras la explosión en cada cilindro. Todo esto se consigue con distintos elementos que forman parte del sistema de escape:

  • El colector de escape. Una vez que se produce la combustión del carburante, los gases generados salen del motor y van al turbo o directamente al colector (si el motor es atmosférico). A partir de aquí, los gases empiezan su viaje hacia el exterior del vehículo.
  • El sensor de oxígeno, más conocido como sonda lambda. Mide la cantidad de oxígeno que viene de los gases de escape generados tras la combustión. Con esto, el coche sabe si la inyección es muy rica o muy pobre y, en función de estos parámetros, modifica el flujo de carburante que hay que inyectar en cada cilindro. Si el coche tiene un problema de combustión se puede saber a través de este sensor de oxígeno.
  • El catalizador. Su misión es fundamental porque convierte los gases nocivos del motor en otros que no lo son. Lo consigue porque en su interior hay varios materiales nobles como el oro, el rodio, el paladio, el platino… que están integrados en una red de celdas de cerámica. Cuando los gases pasan por estos elementos se produce una catálisis en la que el monóxido de carbono y el óxido de nitrógeno se convierten en nitrógeno, dióxido de carbono y agua, elementos que ya forman parte de la naturaleza.
  • El silenciador. Como su propio nombre indica, su misión es intentar reducir toda la gama de frecuencias del ruido generado por las explosiones en el motor. Esto se consigue porque en su interior hay varios sistemas de absorción de ruido como cámaras de expansión, placas, tubos perforados, etc.
  • El resonador. Es un tubo con forma cilíndrica que se sitúa justo al lado del silenciador. Su misión es reducir todavía más el ruido que el silenciador no ha conseguido filtrar. Lo hace anulando un rango concreto de frecuencias de sonido, que normalmente suelen ser las intermedias, ya que en las frecuencias bajas el coche no hace tanto ruido y las altas no son muy comunes (está relacionado con un rango de rpm altas). Según el tamaño de la cámara interna y su forma, dejará pasar más o menos decibelios y, por tanto, emitirá un sonido u otro.
  • El tubo de la cola. Es la última de las partes del tubo de escape, por donde finalmente salen los gases. Es un elemento decorativo y, de hecho, si te fijas en algunos coches, pueden tener hasta cuatro tubos saliendo por la parte trasera del vehículo. Sin embargo, si te agachas un poco verás que, en realidad, sólo llevan un tubo direccionado hacia el suelo, así que los demás no son funcionales y simplemente tienen un sentido estético.

Cada una de las partes del tubo de escape que hemos explicado tienen su función. Así que si alguna se avería, puede que no llegues a pasar la ITV o que tu coche dé algún tipo de error en el panel de instrumentos. En tal caso, lo más aconsejable es acudir a algún taller, como los que forman parte de la red Eurekar con la garantía del RACE, para que resuelvan el problema.

Si tienes una avería en el tubo de escape, acude a uno de los talleres de la red Eurekar, que tienen la garantía del RACE.
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