
Un seguro de coche a terceros es la modalidad más básica que existe entre los tipos seguros que un vehículo puede tener. Ofrece una cobertura mínima obligatoria de los daños que puedas causar, tanto a otras personas como a otros bienes tras haber provocado un accidente de tráfico; es decir, cubre la responsabilidad civil obligatoria y el daño a terceros, tanto personales como materiales. Sin embargo, no cubre los daños propios, aunque hay modalidades de seguro a terceros que sí contemplan ciertas opciones personales.
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Tipos de seguros de coche a terceros
Los seguros de coche a terceros pueden clasificarse en tres modalidades principales: básico, ampliado y con franquicia. A continuación, explicamos en qué consiste cada uno:
Seguros de coche a terceros básico
Es el seguro mínimo que debe tener cualquier vehículo que circule por la carretera y se corresponde con el seguro de responsabilidad civil que exige la ley.
El seguro de coche a terceros cubre los daños materiales y personales que causes a un tercero y aquí se incluye el conductor y sus ocupantes, además del otro vehículo y las cosas que lleve en su interior. Esto es la responsabilidad civil obligatoria, que en costes no puede exceder de los 70 millones de euros en caso de daños a personas y de 15 millones de euros en caso de daños a vehículos, bienes y materiales. Como opción añadida existe la responsabilidad civil voluntaria, que aporta 50 millones de euros más a la obligatoria.
Dependiendo de la aseguradora, te puede incluir alguna cobertura más:
- Asistencia en carretera.
- Asistencia jurídica para las multas de tráfico.
- Responsabilidad civil voluntaria.
- Seguro al conductor: se indemniza por fallecimiento o incapacidad.
- Reclamación al Consorcio de Compensación de Seguros por catástrofe natural.
Seguro a terceros ampliado
El terceros ampliado incluye las coberturas básicas y suma otras adicionales que pueden proteger tu propio vehículo:
- Rotura de lunas: normalmente cubre la reposición o reparación de los cristales laterales, además de la luna trasera y el parabrisas.
- Incendio: la cobertura incluye los daños por incendio en todo el vehículo, tanto por dentro como por fuera.
- Robo: cubre tanto los daños producidos por el intento de robo como el propio robo.
- Otras coberturas: coche de sustitución o asistencia en caso de atropello a animales cinegéticos.
Seguro a terceros con franquicia
La franquicia es una cantidad o porcentaje que se debe abonar a la hora de hacer una reparación y que está previamente pactada por el asegurado y su compañía. Por ejemplo, si tienes un accidente y tienes una franquicia de 500 euros, si el coste total de los daños es de 1.500 euros, los primeros 500 euros los tendrás que abonar de tu bolsillo. A cambio, el precio de la póliza es menor que un seguro sin franquicia.
El seguro a terceros con franquicia es una modalidad muy poco común. La franquicia que se aplica es sobre los daños de responsabilidad civil y también sobre los daños propios a tu vehículo. Al ser tan poco común, ninguna compañía ofrece por defecto esta opción, tienes que solicitarlo tú. Sólo es aconsejable este modo si la franquicia es muy reducida ya que, de por sí, los seguros a terceros suelen ser bastante baratos.
Precio de un seguro de coche a terceros
El precio de un seguro depende de muchos factores que están relacionados con el perfil del conductor y las características del vehículo. Dentro de los seguros, el de terceros es el más barato de todos y, dependiendo de la compañía, va a costar más o menos, aunque todos rondan entre los 150 € y los 250 € al año. Si optas por un terceros ampliado, el coste puede subir unos 50 euros. Si andas algo justo de dinero, siempre puedes fraccionar el pago, aunque ten en cuenta que se aplicarán recargos adicionales.
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