Las luces de gálibo son una parte esencial de la iluminación en determinados vehículos y remolques, y sirven para comunicar al resto de conductores las dimensiones del mismo, tanto en anchura como en altura. Se trata de una variante de las luces de posición y su finalidad principal es la de conseguir que aquellos que las llevan sean vistos y percibidos en su totalidad por el resto de conductores, para que estos puedan ser conscientes de la envergadura de esos vehículos y estimen adecuadamente la distancia y la velocidad necesarias para evitar imprevistos.
Si necesitas cualquier reparación en la carretera,
el RACE te ofrece atención inmediata con la asistencia en carretera líder.
¡Más información aquí!
El Reglamento de Circulación no incluye ninguna especificación en cuanto al tamaño o forma de dichas luces, pero sí establece que deben ser cuatro:
- Dos de color rojo, en la parte trasera.
- Dos de color blanco en la delantera.
Son obligatorias cuando el vehículo mide más de 210 centímetros de ancho, aunque se recomiendan a partir de 180 centímetros, y han de ir colocadas en los vértices superiores y exteriores del vehículo (es decir, en las esquinas), delimitando su contorno.
El gálibo, por lo tanto, marca las dimensiones máximas que estos vehículos pueden tener para acceder a determinados tramos con túneles, puentes, aparcamientos u otros elementos que puedan interferir con la circulación del mismo, y contribuyen a mejorar la seguridad de la circulación.
¿Cuándo deben usarse las luces de gálibo?
La regulación del uso de las luces de gálibo que acabamos de mencionar hace que estas sean obligatorias para vehículos de medidas especiales como camiones, transporte de mercancías, autocares o maquinaria de obras públicas, por ejemplo.
Cualquier vehículo cuya anchura supere los 210 centímetros deberá usar estas luces conjuntamente con las de posición, en las siguientes circunstancias:
- Durante la noche o siempre que las circunstancias meteorológicas o ambientales reduzcan la visibilidad, como en caso de nieve, lluvia o niebla intensa.
- En túneles o pasos inferiores afectados por la señal de túnel.
- Cuando el vehículo que debe llevarlas se encuentre inmovilizado en carretera, entre la puesta y la salida de sol o bajo condiciones climatológicas adversas.
Señales de gálibo
A la hora de circular por carretera, es frecuente encontrar señalizaciones que hacen referencia al gálibo para que los conductores de estos vehículos sepan la altura y/o anchura máxima permitida para seguir circulando por ese tramo (como, por ejemplo, en las proximidades de un túnel). También son comunes a la entrada de los aparcamientos o garajes.
Estas señales tienen forma circular con borde rojo, y en su interior se indicará la altura o anchura máxima permitida, con la ayuda de unas flechas en la zona superior e inferior (si hace referencia a la altura), o a los lados (si se refiere a la anchura). Según las características de la zona de paso, el gálibo puede señalizarse con pórticos o barras que delimitan el contorno máximo en esos lugares.
Si las luces de tu coche necesitan ser sustituidas,
acude a uno de los talleres RACE Eurekar que tienen la garantía del RACE.
¡Encuentra tu taller!