Contaminación acústica vehículo

En el debate sobre el medioambiente y la sostenibilidad, a menudo pasamos por alto un aspecto invisible pero omnipresente en cualquier entorno urbano: la contaminación acústica. El ruido constante de vehículos, bocinas y muchos otros dispositivos mecánicos no solo afecta a nuestro bienestar auditivo, sino que también tiene consecuencias significativas para la salud y el medio ambiente. Por eso, desde RACE queremos explorar contigo en qué consiste, cuáles son sus consecuencias y qué hacer para evitarla.

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¿Qué es la contaminación acústica y qué impacto tiene?


Por contaminación acústica o sonora nos referimos al exceso de sonido que perturba el entorno natural. Un fenómeno que no solo proviene de las carreteras, sino también de fuentes como industrias, aeropuertos o eventos recreativos. En el contexto de la industria automotriz, los vehículos son una de las principales contribuyentes a este problema.

La contaminación acústica no es solo una molestia auditiva; también tiene consecuencias negativas para la salud humana y el medio ambiente. Varios estudios han demostrado que la exposición constante al ruido puede causar estrés, ansiedad, trastornos del sueño, problemas cardiovasculares y afectar la concentración y la productividad. De hecho, según el Instituto de Salud Global de Barcelona, más de la mitad de la población adulta en 749 ciudades europeas está expuesta a niveles de ruido nocivos para su salud. Y, además, la fauna silvestre se ve amenazada, ya que el ruido puede interferir con la comunicación entre animales y afectar sus patrones de alimentación y reproducción.

¿Cómo impacta la industria de la automoción en la contaminación acústica?


El tráfico rodado desempeña un papel significativo en la contaminación acústica de las ciudades, al generar una gran número de ruidos:

  • Los motores de combustión interna emiten ruidos, especialmente en vehículos con sistemas de escape ineficientes o modificados. Esto puede ser una fuente importante de contaminación acústica, especialmente en áreas urbanas congestionadas.
  • El contacto de los neumáticos con la carretera genera ruido, especialmente a altas velocidades. La calidad del pavimento y su resistencia son factores que también influyen en el nivel de ruido que se genera.
  • Sistemas de escape modificados. Algunos conductores instalan sistemas de escape modificados o de alto rendimiento que aumentan la contaminación acústica.
  • La acumulación de vehículos en áreas urbanas y las congestiones de tráfico pueden resultar en un ruido constante y elevado.
  • Los camiones y vehículos comerciales pesados tienden a generar niveles de ruido más altos debido a sus motores más grandes y al movimiento de carga.

En lo que respecta al nivel máximo de ruido que puede emitir un coche, este se sitúa en 87 decibelios (dB). Superar este umbral (o el que se especifica en la ficha técnica del vehículo) es motivo de sanción, dependiendo la cuantía de en cuánto se exceda: si se sobrepasa en hasta cuatro decibelios, se considera una infracción leve y conlleva una multa de 90 euros; si está entre cuatro y siete, es una infracción grave y la multa oscila entre 91 y 300 euros; mientras que, por encima de los siete, la multa se sitúa entre los 300 y los 600 euros.

La contaminación acústica en España


En España, la preocupación por la contaminación acústica ha ido en aumento. Según datos recopilados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en 2022, más del 60 % de la población española está expuesta a niveles de ruido que superan los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las áreas urbanas, especialmente las ciudades grandes, son las más afectadas, con niveles de ruido que a menudo superan los 65 decibelios, el límite establecido por la OMS para evitar impactos negativos en la salud.

En términos del impacto específico de los vehículos, un informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) señaló que el tráfico rodado es responsable de aproximadamente el 75 % del ruido ambiental en áreas urbanas en Europa, unas cifras que reflejan la urgencia de abordar la contaminación acústica en el ámbito de la automoción.

Cómo evitar la contaminación acústica


La adopción de tecnologías más silenciosas y prácticas para reducir el ruido de los vehículos es esencial para contrarrestar la contaminación acústica. A nivel general, son varias las medidas que pueden implementarse:

  1. Desarrollo de vehículos eléctricos y de hidrógeno, generalmente más silenciosos que los motores de combustión interna. Su adopción generalizada podría tener un impacto significativo en la reducción del ruido en áreas urbanas.
  2. Recurrir a medios de transporte sostenible, como bicicletas, patinetes eléctricos, coches de suscripción u otros vehículos de uso compartido en las ciudades.
  3. Diseño de carreteras y sistemas de transporte inteligentes. La planificación y diseño de carreteras pueden incluir barreras de sonido y tecnologías de absorción de ruido para mitigar la propagación del sonido.
  4. La implantación de normativas más estrictas respecto al control de emisiones acústicas por parte de los vehículos podría impulsar a la industria a desarrollar tecnologías más silenciosas.
  5. A su vez, la concienciación pública sobre los impactos negativos del ruido en la salud y el medio ambiente puede fomentar conductas más respetuosas con el entorno.

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